Son muchas las sensaciones y percepciones nuevas que te llevas de un viaje o alguna experiencia. Incluso, en ciertos momentos, todo se puede tornar al absurdo hasta limites inimaginables.
Esta imagen surrealista que he realizado a base de figuras geométricas es la que se me vino a la cabeza cuando me dio por recordar el apartamento que alquilé, junto con un grupo de adorables amigos, en mi viaje a Roma. No sabíamos donde nos metíamos y, aún así, convivimos como pudimos en un apartamento que no tenía numeración en el porterillo pero sí un extraño nombre ...
Strange Loft.
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